¿Abrimos el corazón a la vida con unas äsanas?

¿Te has dado cuenta que en las sesiones de yoga se utiliza mucho la expresión “abrimos pecho”, “abrimos el corazón”? ¿Qué te ha venido a la cabeza al escuchar esto? Sé sincera.

Al principio a mi me venía una respuesta automática: “después de las ostias y palos que me he llevado, aquí hay más corazas que en El caballero de la armadura oxidada”.

No es de extrañar, no. Nos hemos llevado disgustos, hemos sufrido mal de amores (empezando por no querernos a nosotras mismas), nos hemos infravalorado, hemos perdido a seres queridos, etc. Así que es normal que estas preguntas nos hagan sentir incomodidad y frustración y que pensemos que si evitamos sentir evitaremos sufrir. Error! Lo único que conseguiremos es cerrarnos a la vida y nos iremos apagando como una vela.

Cuando empecé con el yoga me imaginaba que sería bastante fácil para mi gestionar la parte física y la emocional, ya que llevaba años haciendo terapia, había superado un divorcio y siempre me había cuidado físicamente. Pero ya sabemos cómo funcionan las expectativas, ¿verdad? No se cumplen!

Y en realidad es genial que no se cumplan nuestras expectativas! Gracias a la sensación de decepción o desengaño vivimos un nuevo despertar, y nos hace ser más humildes y compasivos con nosotras y con el mundo.

Tenemos que ser conscientes que en el yoga hay muchísimas åsanas que nos ayudan a abrir el pecho o corazón, y si las mantenemos durante varios minutos su efecto se cuadriplica. A través de ellas pueden salir emociones como llanto, risa histérica, miedo, ansiedad o incluso angustia. En estos momentos es cuando tenemos que estar presentes y conscientes para poder identificar qué emoción es y dejarla salir; ¡NUNCA te reprimas! Yo lo hacía y reconozco que aún me reprimo a veces por vergüenza a mostrarme, porque tengo la creencia limitante que si muestro mis sentimientos y emociones significa que soy débil.

El truco para poder estar en una åsana durante segundos o minutos es entrar en ella poco a poco, respirando, relajando el entrecejo, la mandíbula y los hombros. Luego podrás sentir cómo te sube la autoestima, tu alma se enriquece y te da una fortaleza interna que dura horas! Yo te invito a hacerlo delante un espejo y te fijes en cómo haces las åsanas.

La paz interior se refleja en el exterior. Si no estás a gusto en el trabajo pero aguantas porqué “se tiene que trabajar para vivir y no voy a encontrar algo que me guste”; si te quieres separar pero aguantas “porqué todos los hombres son iguales, porqué ya me he acostumbrado a esta vida, porqué no sé estar sola”; si quieres cuidarte y empezar a comer más sano pero la mente te dice que “no eres lo suficientemente capaz de seguir unas pautas, que eres débil y que nunca adelgazarás”; si te apuntas al gimnasio sabiendo que no vas a ir, etc., estarás debilitando tu corazón, tu autoestima, tu poder personal. ¿Pero sabes lo positivo? TODAS estas situaciones también son oportunidades para que abras más tu corazón y te reafirmes en tus valores y fortalezas.

Además, el yoga te puede ayudar mucho en esto. Me gustaría que por lo menos intentaras las siguientes posturas durante unos minutos en casa, sin marido, sin niños y sin perros que te den lametazos o gatos que se acurruquen en tu pecho.

Espero que lo disfrutes y que tengas paciencia.

Un abrazo,

Nuria Segués, profesora de Ashtanga Yoga

asanas-yoga

Imagen extraída de www.teenytinyom.com

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

RESPONSABLE: NURIA ROURA SEN SL. FINALIDAD: GESTIONAR EL ENVIO DE INFORMACION Y PROSPECCION COMERCIAL Y DAR ACCESO A LOS PRODUCTOS ONLINE. LEGITIMACIÓN: CONSENTIMIENTO DEL INTERESADO. DESTINATARIOS: EMPRESAS PROVEEDORAS NACIONALES Y ENCARGADOS DE TRATAMIENTO ACOGIDOS A PRIVACY SHIELD. DERECHOS: ACCEDER, RECTIFICAR Y SUPRIMIR LOS DATOS, ASI COMO OTROS DERECHOS COMO SE EXPLICA EN LA INFORMACION ADICIONAL. INFORMACIÓN ADICIONAL: PUEDES CONSULTAR LA INFORMACION ADICIONAL Y DETALLADA SOBRE PROTECCION DE DATOS EN NUESTRA PAGINA WEB.