La leche materna es el alimento perfecto para la alimentación del bebé en sus primeros meses de vida. Producida por la propia madre para el recién nacido, contiene la cantidad de nutrientes precisa que el bebé necesita, variando su composición a medida que el niño crece para adaptarse a sus requerimientos.
En la producción de la leche materna, son varias las hormonas que entran en juego. Junto con el propio estímulo que produce el bebé al succionar el pezón durante el amamantamiento, las glándulas mamarias generan la cantidad de leche ideal para que el bebé tenga suficiente y siga un ritmo de crecimiento regular.
Ya que es el cuerpo de la madre el que produce el alimento que toma el bebé, la alimentación de la mujer juega un papel esencial. Es aquí dónde cobra más importancia la expresión de ‘somos lo que comemos’, ya que la leche que tomará el bebé contiene precisamente los nutrientes que toma la madre en su dieta.
Producción de leche durante la lactancia materna
Una de las grandes ventajas de dar el pecho al bebé es que la madre puede recuperarse del embarazo más rápidamente. No te pierdas todos los beneficios de la lactancia materna en este artículo de El Blog de tu Bebé.
Además de ser un alimento perfecto para el bebé, las hormonas que participan en la producción de la leche, la prolactina y la oxitocina, estrechan vínculos entre la madre y el bebé, y ayudan a recuperar el cuerpo de la mujer que ha sufrido tantos cambios a lo largo del proceso del embarazo y el parto.
Para la producción de la leche materna se necesitan muchos nutrientes, pero también calorías. La leche que toma el bebé es rica en energía, que procede de los depósitos de grasa que la mujer ha ido acumulando a lo largo del embarazo, provocando una pérdida de peso notable siempre que se siga una dieta post-parto equilibrada.
Si bien no es necesario ‘comer por dos’ durante los meses de lactancia materna para fomentar la producción de leche, las necesidades calóricas sí que aumentan ligeramente en la madre. Este proceso natural en el amamantamiento del bebé es puramente intuitivo, aunque no siempre el estilo de vida actual nos da pie a seguir una alimentación adecuada para cuidar de una misma y del bebé al mismo tiempo.
¿Cómo influye la alimentación de la madre en el contenido de la leche materna?
Desde el primer momento en que se produce el embarazo, con la finalidad de que el bebé se desarrolle y crezca sano, el cuerpo de la madre está programado para aportar todos los nutrientes que este necesita. Por lo general, una dieta deficiente suele afectar más a la propia madre que al bebé. Incluso en la producción de leche, las glándulas mamarias harán correctamente el trabajo para el cuál están programadas, produciendo una leche con las cantidades de hidratos de carbono, proteínas, grasas, micronutrientes y anticuerpos que el bebé necesita según la etapa en la que se encuentre.
Por este motivo, para cuidarse y está bien para su bebé, la madre tiene que prestar más atención a una buena alimentación, cuidando su propia salud.
Además de ello, la alimentación de la madre pueden influir de otras materas en el contenido de la leche materna. Una de las que más llama la atención es la introducción de nuevos sabores al bebé. Está demostrado que hay algunos alimentos que consume la madre, aportando un sabor determinado a la leche, que puede hacerla más atractiva para el paladar del bebé, e incluso provocar cierto rechazo.
De la misma forma que algunas sustancias de los alimentos pasan a la leche materna y cambian su sabor, los bebés lactantes pueden recibir otras partículas procedentes de alimentos y bebidas que les afectan de manera negativa, como puede ser el alcohol o la cafeína de bebidas excitantes.
Calorías recomendadas para una mujer que da el pecho
¿Cuántas calorías necesita una madre lactante? El apetito que tenga será el mejor indicativo de las necesidades calóricas de la madre según el desarrollo del bebé que está amamantando. Si además de la lactancia materna se recurre a una alimentación complementaria con leche de fórmula, o con otros alimentos a partir de los 5-6 meses de edad, los requerimientos serán diferentes.
Para producir unos 150 ml de leche materna se requiere una media de 800 kcal. Esta energía se puede obtener de la dieta de la madre, pero también de los depósitos de grasa acumulados, conllevando una perdida de peso importante a través de la lactancia materna.
Basta con incrementar la ingesta calórica entre 300-400 kcal según las condiciones de cada madre, para poder producir la cantidad correcta de leche para el bebé. Además de calorías, la dieta de la madre debe proporcionar los nutrientes que tanto el bebé como ella misma necesitan en esta etapa crítica.
Consejos para la alimentación de la madre durante la lactancia
Para la producción de leche materna, es suficiente con seguir una dieta variada, incluyendo todo tipo de alimentos para asegurar el aporte de todos los nutrientes. No es necesario hacer dieta para perder peso mientras se da el pecho, pero sí controlar el consumo de alimentos, así como el peso de la madre y el correcto crecimiento del bebé.
Algunas de las pautas a seguir en la alimentación durante la lactancia materna son las siguientes:
Alimentación variada
La alimentación de la madre lactante deberá ser lo más variada posible, basándose sobre todo en el consumo de frutas, verduras, alimentos proteicos, cereales enteros ricos en fibra, legumbres y frutos secos.
Proteínas para la leche materna
Las necesidades proteicas durante la lactancia se ven ligeramente aumentadas, ya que el bebé necesita gran cantidad de proteínas en su etapa de máximo crecimiento.
Consumo de grasas durante la lactancia
El consumo de grasas es cambio no se verá aumentado. Es suficiente con limitar las grasas menos beneficiosas para la salud de la madre y el bebé, recurriendo a las grasas saludables que sean fuente de vitamina E y ácidos grasos esenciales.
Vitaminas y minerales
Los requerimientos de vitamina A, D, E, C, B1, B2 y ácido fólico aumentan en la etapa de producción de leche materna. Estas vitaminas se encuentran sobre todo en alimentos de origen vegetal, variando su consumo lo máximo posible para asegurar un correcto aporte.
Aporte hídrico
Además de los macro y micronutrientes de la dieta, el consumo de líquidos deberá ser mayor en la lactancia. Ya que el agua es el principal componente de la leche materna, la madre precisará tomar más líquidos a través de agua natural, infusiones y zumos naturales, para producir la suficiente cantidad de leche.
Alimentos prohibidos o de consumo limitado
Las bebidas alcohólicas están contraindicadas para la madre durante el tiempo que le dé el pecho al bebé. Así mismo se debe moderar el consumo de bebidas excitantes como café, té y refrescos con cafeína, algunos fármacos y el tabaco, que podrían pasar a la leche materna y afectar al bebé. En este enlace de elblogdetubebe.com puedes ver más alimentos desaconsejados durante el embarazo.
Cualquier tipo de dieta para la lactancia materna que logre un aporte de los nutrientes que necesitan la madre y el bebé es muy saludable. Ante cualquier duda, la ayuda profesional de un nutricionista o el consejo médico puede ser la mejor guía para asegurar la producción adecuada de leche materna.
Fuentes
The impact of breastmilk on infant and child health
Breastfeeding in the 21st century: epidemiology, mechanisms, and lifelong effect