Dieta detox para recuperar la salud y la energía

Una dieta detox es aquella que se basa en alimentos que promueven las funciones de eliminación de toxinas, depurativos, ecológicos, de temporada; libre de alimentos procesados, refinados y artificiales. Es una alimentación basada en plantas, alimentos integrales y consumidos lo más parecidos a su estado y origen natural. El principal objetivo de una dieta detox depurar el cuerpo, eliminar toxinas, restablecer las funciones de nuestros órganos y el organismo en general y, por supuesto, que sea un punto de partida para recuperar la salud, tener energía y nutrirnos desde dentro hacia fuera.

Dieta detox para recuperar la salud y la energía

Hay muchos tipos de dieta detox y mucha información al respecto, pero lo que tienes que tener siempre presente hagas la que hagas es lo siguiente:

Ajusta la dieta detox a tus necesidades

Como no hay una persona igual a la otra, tampoco existe una dieta detox única para todos. Lo importante es que los días en los que hagas la dieta no consumas azúcar, alcohol, café, tabaco, refrescos, productos procesados y refinados, embutidos, carne, pescado, lácteos, harinas ni huevos. Puedes hacerla más o menos intensiva. Tu dieta detox sí debe incluir fruta y verdura fresca, y opcional semillas, hierbas aromáticas, especias, algas, cereales integrales sin gluten y legumbres.

Ten en cuenta tu estilo de vida

Esto es súper importante. Si trabaja todo el día fuera de casa y no tienes acceso a poder hacerte zumos, no tiene lógica hacer una dieta detox a base de zumos (excepto si compras zumos cold-pressed on-line y los puedes mantener en fresco). En cambio, te irá bien una dieta detox adaptada al tupper de oficina. A mi, por ejemplo, me funciona mucho entre semana una dieta detox de monodieta de fruta cuando tengo mucho trabajo. Aprovecho que en este tipo de detox no tengo que cocinar y que no gasto energía en la digestión; pero por la contra, no es una dieta que se pueda hacer muchos días sin supervisión médica. En cambio, una dieta detox basada en zumos, batidos verdes, ensaladas, cremas de verduras, semillas, algas y grasas saludables se puede seguir muchos más días.

Suda pero no te excedas con el ejercicio físico

Sudar ayuda a eliminar las toxinas, y esto es importantísimo durante una dieta detox. Pero lo que no hay que hacer es continuar o empezar con nuestra rutina de entrenamientos si es fuerte e intensiva. Unos días de detox son para reconectar, parar, tomar conciencia, respirar, masticar, estar presentes. Si hacemos ejercicio físico lo mejor es escoger alguno suave como andar, bailar, ir en bici, yoga relajado, pilates o saltar en un minitrampolín por ejemplo. No es aconsejable hacer una dieta detox muy restrictiva junto con una rutina de entrenamientos intensiva, ya que puedes quedarte literalmente sin energía, exhausta e incluso sufrir náuseas o vómitos. Recuerda siempre que una dieta detox es para recuperar la salud y hacer un reset, mimar tu cuerpo y darle lo que realmente necesita.

La hidratación es muy importante

Durante una dieta detox es igual de importante lo que comemos que lo que bebemos. Ya hemos dicho que fuera los refrescos, el café y el alcohol. El líquido que bebamos a lo largo del día tiene que ser agua, agua infusionada con fruta y/o verdura, agua con limón, infusiones, caldos caseros depurativos, zumos o batidos verdes o tés alcalinos como el mu, el bancha o el kukicha. Por la mañana lo primero de todo será beber agua, ya sea sola o con medio limón exprimido, y a temperatura ambiente, templada o caliente. El resto del día nos hidratamos con el líquido comentado, que no esté nunca frío, y tampoco lo tomaremos mientras comemos o cenamos. El agua interfiere en la digestión, así que la mantenemos alejada de la comida y la cena.

Cambia tu desayuno habitual por un zumo o batido verde

Estas bebidas detox serán tus aliadas para recuperar la salud y la energía que tanto deseas. Tanto los zumos como los batidos verdes están repletos de vitaminas, minerales y enzimas activos que ayudan a nutrirte desde dentro hacia fuera, así que te sentirás con energía, te verás radiante y desprenderás buen humor por todos los lados. Además, al tomarte el zumo o el batido estás dejando de beber o comer otras cosas que no te ayudan a recuperar tu salud, como el café, la leche, los cereales refinados, el bocadillo de pan blanco, etcétera. En mi página web puedes encontrar muchas recetas de batidos verdes y también algunos zumos depurativos.

No picotees y programa tus horarios de comida

En cualquier dieta saludable hay que estar atento a aquello que comemos entre horas y qué picoteamos mientras preparamos la comida o la cena. Muchas veces lo que nos está perjudicando en nuestros objetivos de salud es lo que comemos sin ni siquiera ser conscientes. Durante una dieta detox es muy importante dejar descansar el sistema digestivo entre las comidas principales, con la finalidad de que el organismo pueda depurar y digerir durante el máximo tiempo posible. En caso de sentir sensación de hambre primero nos hidrataremos, y si pasados unos minutos continúa esa sensación tomaremos un zumo o batido verde o, si nos apetece masticar, escogeremos fruta o verdura fresca.

Cena muy ligero y temprano

Este momento del día es crucial en una dieta detox, y una buena oportunidad para coger el hábito saludable de cenar lo antes posible (no más tarde de las 20h) y ligero. En verano puede ser una crema de aguacate y pepino o una ensalada verde con tomate, pimiento, pepino y germinados; en otoño una ensalada templada donde haya verduras de hoja verde y otras verduras asadas al horno, o un salteado corto de verduras; en invierno un caldo depurativo o una crema de verduras junto con muchos germinados; y en primavera algún plato con alcachofas, muchos germinados y hoja verde.

Duerme lo máximo posible

A partir de las 22h00 nuestro organismo empieza a hacer sus procesos naturales de limpieza, aprovechando que no estamos comiendo ni haciendo ninguna actividad. Si en lugar de estar descansando estamos ingiriendo alimento o activos no dejamos que nuestro cuerpo haga sus funciones correctamente. Si cenamos pronto nos podemos ir a la cama temprano y respetar el reloj biológico, favoreciendo así los procesos de limpieza. Lo ideal sería dormir unas 8 horas.

Mastica, mastica y vuelve a masticar

La digestión empieza en la boca, con la masticación. El estómago no tiene dientes, así que se lo tenemos que poner fácil. Al momento que masticamos, las enzimas digestivas presentes en la saliva comienzan a descomponer los alimentos, preparando el proceso de absorción de nutrientes. Además, con una buena masticación alcanzamos la máxima absorción de todas la vitaminas y minerales del alimento; de esta manera no necesitamos comer tanta cantidad. Recuerda siempre en masticar bien, y no sólo por una cuestión “espiritual” de estar más conectada con el acto de comer y de parar un momento; sino porque es muy importante para que hagamos bien la digestión del alimento y evitar así los gases, hinchazones y otras molestias gastrointestinales.

Haz respiraciones mindfulness

Las respiraciones mindfulness son aquellas que hacemos profundas y para estar presentes en el aquí y el ahora. El «simple» acto de inspirar en 8 segundos, aguantar la respiración 2 segundos y expirar también en 8 segundos te permitirá tomar conciencia de tu estado, depurar tu mente y además oxigenarás tus pulmones. Mi consejo es que hagas estas respiraciones al levantarte para empezar el día con calma, antes de cada comida y una vez acostada en la cama para dormir mejor.

Mímate y cuídate por dentro y por fuera

La mejor hora del día para mimarte es por la mañana. Te aconsejo que te levantes veinte minutos antes de lo habitual para empezar el día con calma y respirando profundo, dándote tiempo para limpiarte la lengua, cepillarte el cuerpo en seco, hidratar tu piel con aceite de coco u otro producto ecológico y hacer una rutina que te haga sentirte bien mientras que además te sirva para ayudar a tu cuerpo a movilizar las toxinas que estás intentando eliminar con la dieta detox.

Trucos para no «morir» en el intento y abandonar el detox 

Escribe y anota cual es tu objetivo.

Anota y deja visible a la vista qué es lo que te motiva a hacer una dieta detox. No pienses en el «porqué», sino en el «para qué». Puede que tu objetivo sea recuperar las buenas digestiones, deshincharte, dormir mejor, recuperar unas rutinas saludables que has perdido, incorporar más fruta y verdura fresca a tu dieta, depurar la mente o emociones estancadas, etcétera. El hecho de escribirlo y leerlo a menudo te ayudará a no abandonar “la causa”.

Pon el foco de atención en tu salud, no en el peso ni en hacerlo porque está de moda.

La salud es un tema que nos preocupa a todos. No hay nada más desagradable que sentirnos enfermos, sin energía, con malas digestiones o el miedo a contraer algún tipo de enfermedad más grave. Si este miedo lo canalizas en energía positiva para mantenerte firme en tu propósito te dará la fuerza necesaria para que cuando tengas un bajón o dudes si abandonar o no la dieta detox sigas adelante. Piensa también que siempre puedes reajustarla a tus necesidades. Si has empezado con una dieta detox que te resulta demasiado restrictiva tienes que relajarte y hacerla más permisiva. En todo momento tienes que acordarte que es una elección y opción que has hecho tu desde el amor hacia ti porque quieres sentirte bien desde dentro hacia fuera.

Tómalo como una oportunidad y empujón para empezar con los buenos hábitos.

Una dieta detox es ideal para tomar las riendas de tu alimentación y coger el empujón que necesitas para luego continuar con las rutinas saludables adquiridas. Al haber terminado la dieta detox te sentirás orgullosa, satisfecha, radiante, feliz y con mucha energía para desear continuar con la misma actitud y salud. Será como un soplo de aire fresco en medio del estrés y malestar que estabas sintiendo antes de empezar la dieta detox.

Márcate un objetivo realista.

Primero mira tu agenda y asegúrate que los días que quieras hacer la dieta detox los tienes completamente libres de actos sociales, viajes u otros obstáculos que interfieran en la realización del plan alimenticio que te hayas marcado. Luego, sé sincera contigo misma, valora tu estado de salud y tu estilo de vida y escoge el tipo de dieta detox más alineada a ti. Si te propones un objetivo demasiado alejado a tu realidad es muy probable que no lo consigas o te cueste un esfuerzo tan grande que tires la toalla. Es mejor ir a paso más lento pero más seguro si quieres terminar la dieta detox con éxito.

Organiza tu agenda.

Anota en tu agenda las actividades que están relacionadas con la dieta detox: día que vas a ir a comprar, si necesitas hacer algún pedido especial, los horarios de preparación de la comida, el tiempo que necesitas para prepararte el zumo o batido verde de la mañana o la hora en la que darás un paso o harás una actividad física suave. ¿Verdad que te anotas en la agenda la hora del pediatra de tu hijo o el día que tienes que renovar el DNI? Pues igual o más importante es agendar aquello que está relacionado con tu salud y bienestar.

Incorpora pensamientos positivos sobre la dieta detox. 

¿Sabías que cada día tenemos unos sesenta mil pensamientos y que, además, el 99% son repetidos del día anterior? Nuestros pensamientos, además, determinan nuestros actos y, por lo tanto, nuestra realidad, y viceversa. Entonces, no dejes que te vengan pensamientos negativos sobre la dieta detox, y en cuanto detectes que viene alguno cámbialo rápidamente por uno positivo. Por ejemplo, si piensas “qué pereza tener que comerme otra vez una ensalada para cenar”, automáticamente cámbialo por “que bien que tengo la oportunidad de nuevo de cenar ligero y dormir mucho mejor”.

Responde siempre con mucho amor y una gran sonrisa. 

Si durante la dieta detox alguien de tu alrededor te hace un comentario en negativo sobre lo que estás haciendo no te enfades y sé tolerante; entiende que el comentario no va contigo, que para la otra persona es algo desconocido o incluso un objetivo que desearía alcanzar, y responde a su comentario con mucho amor y una gran sonrisa. Si tienes cerca tu nota donde tienes escrito tu objetivo léetela de nuevo, o aprovecha para escribirlo de nuevo. No dejes que nada ni nadie –ni siquiera tu misma- borre o te haga perder de vista tu objetivo y la ilusión que tienes por alcanzarlo.

Comparte fotos de tus platos en las redes sociales. 

Hacer fotos a los platos y subirlos a las redes sociales puede ser muy motivador, y además te sirve para visualizar lo que has comido ese día y ser consciente de ello. Además, si haces fotos apetitosas es muy probable que la gente que las vea cambien su discurso negativo hacia uno mucho más positivo e incluso también se motiven a hacer una dieta detox. Todos tenemos que hacer algún día una dieta detox, así que si tu experiencia sirve para inspirar a otras personas ¡es maravilloso!

Anota un diario de alimentos. 

Hay estudios científicos que demuestran que al anotar la hora en que comemos, qué consumimos, cómo nos sentimos antes y qué beneficios o incomodidades notamos al terminar ayuda a relacionar las emociones con la alimentación que estamos llevando. Cuando anotamos lo que consumimos durante una dieta detox y lo continuamos haciendo unas semanas después, podemos darnos cuenta de la diferencia en cómo nos encontramos física y emocionalmente cuando comemos alimentos saludables, vivos y fáciles de digerir o por el contrario cuando comemos en exceso, alimentos procesado y refinados o alimentos literalmente muertos. El diario de alimentos es una herramienta muy útil para tomar consciencia de lo que comemos, eliminar el estilo de alimentación que nos está dañando y cambiarlo por uno de saludable.

Lee algún libro sobre dietas detox o mira algún vídeo o documental.

Para tomar conciencia sobre algún tema, como es la importancia de la dieta detox, es indispensable leer e informarse al respecto. En el momento en el que estás leyendo un artículo, un libro o viendo un vídeo te vas reafirmando en tu propósito, y por lo tanto, alargas la motivación respecto a tu objetivo de salud e incluso lo haces más fuerte. ¿Cuantas personas hay que han cambiado su alimentación y se han hecho vegetarianos después de ver algún documental sobre el maltrato animal? Y crees que hay algún activista político que lo sea sin haberse informado sobre el tema? Verdad que no? Pues esto es así con todo. La información nos sirve para darnos cuenta de las cosas; ¡la información es poder!

Da las gracias y anota tus logros antes de acostarte.

Cada día, antes de dormir, da la gracias por haber podido hacer la dieta un día más y anota en tu agenda o libreta 3 logros que has conseguido ese día. Por ejemplo:

1. “He añadido más hoja verde al batido”.
2. Hoy he sonreído más que ayer.
3. Me he sentido con energía después de la comida y no he necesitado hacer siesta.

Reflexión final

Si sientes inquietud por recuperar tu salud empezando por una dieta detox, primero lee e infórmate al respecto, luego valora tus necesidades y estilo de vida y escoge aquella dieta detox que más se ajuste a ti, y cuando tengas decidido cual quieres hacer coge tu agenda y asegúrate que la podrás seguir sin obstáculos. A partir de ahí, sigue las recomendaciones de motivación que te he dado y ¡adelante! Con tus ganas, tu compromiso del 100×100 y las herramientas que te acabo de dar podrás seguir y terminar la dieta detox con éxito total. Y si por algún motivo la tienes que interrumpir no pasa nada, porque cada día tienes la oportunidad de volver a empezarla. ¿Te das cuenta lo afortunados que somos de tener cada día esta posibilidad? ¡Es maravilloso!