Frotarse el cuerpo es algo que puede hacerse antes o después de tomar un baño o ducharse, o a cualquier hora durante el día. Todo lo que se necesitas es un lavabo con agua caliente y una toalla de algodón mediana.
Para lograr un máximo efecto, frota tu cuerpo dos veces al día: una vez en la mañana y de nuevo en la tarde. Frótate de 2 a 20 minutos, dependiendo del tiempo que dispongas. El proceso de frotarse con agua caliente tiene un efecto físico, mental y emocional más profundo si se hace dentro de la bañera o la ducha tranquilamente.
Instrucciones
- Abrir el agua caliente.
- Coger la toalla por los extremos y sumergirla en el agua.
- Mientras la toalla esté caliente y con vapor, empezar a frotar la piel de manera suave.
- Enfocarte en sólo un área de tu cuerpo a la vez: por ejemplo, comenzar con las manos y los dedos y subir por los brazos hasta llegar a los hombros, cuello y cara; luego bajar hasta el pecho, espalda alta, abdomen, espalda baja, glúteos, piernas, pies y dedos.
- Frotar hasta que la piel se ponga ligeramente rosada o hasta que cada parte se caliente.
- Recalentar frecuentemente la toalla después de frotar cada sección del cuerpo o tan pronto la toalla comience a enfriarse.
Beneficios
- Reduce la tensión muscular.
- Incrementa la energía por la mañana y relaja profundamente por la noche.
- Abre los poros para liberar las toxinas almacenadas.
- Suaviza los depósitos de grasa endurecida bajo la piel y los prepara para desechar la grasa.
- Permite que el exceso de grasa, mucosidad, celulitis y toxinas se liberen hacia la superficie, en lugar de acumularse alrededor de órganos vitales más profundos.
- Libera el estrés a través de la acción consciente de frotar la piel.
- Calma la mente.
- Promueve la circulación.
- Activa el sistema linfático, especialmente cuando se frotan las axilas y la ingle.
- Es un masaje fácil y un hábito de cuidado personal profundo.
- Puede ser un momento sagrado de tu día, especialmente si se hace a la luz de las velas con una o dos gotas de aceites esenciales, como la lavanda.
- Crea una relación profunda y amorosa con tu cuerpo, especialmente con las partes a las que no cuidamos frecuentemente y para las personas con problemas de autoestima.
- Reparte la energía a través de los chakras.